La estantería

Deseos de sangre

Autora: Vickie Taylor
Título original: Carved in stone
Género: Novela
Saga: 1er. libro de Las Gárgolas
Editorial: Talismán
Traducción: Silvia Guiu
Dedicatoria: "Para Kathy Baker, la mejor librera del mundo, por creer. 
Para Cathy, Jen y Linda por su amistad y apoyo. Y como siempre, para mi padre y mi madre... por todo".
Año: 2007
Páginas: 333
Año de la primera edición: 2005

Rachel Vandermere recuerda siempre un suceso traumático que la marcó desde niña, cuando fue testigo del brutal asesinato de sus padres por unas criaturas demoníacas con alas. Ahora, a los 27 años es una agente del FBI que intenta hallar una explicación de lo sucedido, y es en una misión en la ciudad de Chicago donde conoce al misterioso Ethan Cross, un guapo y atractivo hombre que tiene un oscuro secreto...

Un libro de temática diferente, si consideramos la cantidad de novelas que se editan actualmente sobre vampiros, hombres lobos y similares. En este caso, el tema versa sobre gárgolas, lo cual resulta novedoso e interesante.

La trama sin duda atrapa y hace que quedes enganchado desde un inicio. De tipo romance paranormal, además del ingrediente romántico, se percibe una atmósfera de suspenso y misterio, con permanente tensión sexual entre los protagonistas. Como advertencia puedo señalar que las escenas sexuales son explícitas. 

La autora consigue trabajar de manera óptima a sus personajes aunque mantiene el cliché del hombre guapo e irresistible, sin embargo, pasando en alto este detalle quedé satisfecha con la gama de personajes que se presentan.

Si buscas entretenerte y te gusta esta peculiar mezcla de fantasía, misterio, romance, erotismo y acción, pues este es tu libro.

- Las buenas chicas no salen con chicos como Von.
- Venga ya, ¿no has leído nunca una novela romántica?
- No. -Alzó una ceja-. ¿Y tú?
- Miles. Y créeme. Las buenas chicas siempre se enamoran de chicos malos.
- Quizás en los libros.
- El arte es el espejo de la vida. -Le sonrió de forma traviesa, luego volvió a mirar la foto de Von y su novia. -¿Sabes adonde quiero ir?...
Pág. 131

-Ten cuidado - le advirtió Nathan, pero le tomó la mano con la suya y empezó a besarle las yemas de los dedos con tanta ternura que ella pensó que se le iba a deshacer el corazón. Lo único es que no quería que él le tomara la mano. Ya había tomado su corazón.

Pág. 175



Les Gargouillen ponían en duda sus preconcepciones sobre los monstruos que llevaba más de veinte años buscando. Le habían hecho darse cuenta de que la gente... los seres... no siempre pueden clasificarse en una categoría definida. Humanos o animales. Hombre o monstruo.
Algunos hombres eran verdaderos monstruos.
Algunos monstruos eran verdaderos hombres.
Pág. 263